La ONG ambientalista Provita incorporó al Plan de restauración Ecológica del Bosque y Matorrales secos de Península de Macanao al guayacán (Guaicum officinale L) del cual se espera su propagación hasta 2022 como parte de las aristas de su Programa de Conservación de la Cotorra Margariteña (Amazona barbadensis) que se ejecuta en la Isla de Margarita (Nueva Esparta).
“Gracias a las diferentes investigaciones que hemos realizado y luego de
una evaluación del bosque seco de Macanao, decidimos incorporar el guayacán
dada su importancia para el desarrollo de la cotorra y propiamente del bosque
seco, además del valor que reviste para Nueva Esparta, por ser el árbol
emblemático de esta región”, afirmó José Manuel Briceño, director para Nueva
Esparta de Provita.
Hasta el cierre del año 2020 Provita había plantado en Macanao cerca de
8 mil árboles de especies nativas como el palo sano, cuica, cuchibano, yaque,
tarantan y aco negro. El objetivo es contribuir con la restauración ecológica
del bosque y matorrales secos de Macanao, degradados por la actividad de
minería no metálica y más recientemente la extracción de madera.
Briceño destacó que gracias al conocimiento de las comunidades locales
sobre el desenvolvimiento de la fauna en la zona y su interés en colaborar, así
como al financiamiento de aliados como Fondation Franklinia, se ha desarrollado
el proyecto de restauración ecológica con énfasis en el guayacán, en vista de
ello se plantearon como meta la siembra de 500 árboles de esta especie al
cierre del 2022.
Briceño detalló que el proyecto además de la reproducción y siembra de
árboles, también abarca un importante trabajo social de concientización y
formación dentro de las comunidades locales, incorporando a los líderes comunitarios
en la generación de conciencia que permita valorar y cuidar la fauna y flora,
además de proyectar los valores esenciales que la para subsistencia tiene el
bosque seco de Macanao.
Por su parte Luis Guevara, biólogo y analista de restauración del
Programa de Conservación de la Cotorra Margariteña, explicó que el guayacán es
un árbol de porte robusto, de copa frondosa siempre verde que cobija una
agradable frescura. Posee hojas de entre 3 a 9 centímetros, flores azuladas y
frutos amarillos que contienen semillas negras con una cobertura carnosa de
color rojo.
Guevara indicó que actualmente trabajan en experimentos con diferentes
técnicas de germinación con el propósito de definir la más apropiada para la
planta en las condiciones de Macanao, así como
incorporar estudios con micorrizas como principio fundamental para
contribuir con la recuperación de esta especie en la zona, así como propiamente
al desarrollo sostenible del ecosistema.
Desde 1989 el Programa de Conservación de la Cotorra Margariteña se
desarrolla en los terrenos del Hato San Francisco-Arenera La Chica en la
península de Macanao.
Prensa Provita Nueva Esparta. (CNP: 21.465).-