El presidente derechista de Chile, Sebastián Piñera, enfrenta una nueva crisis política que provoca uno de los peores momentos de su Gobierno en medio de la pandemia del coronavirus, en el que miles de chilenos salieron a la calle a pedir su dimisión.
Trabajadores privados y estatales,
así como organizaciones universitarias, campesinas y derechos humanos, llevaron
a cabo este viernes una huelga general para repudiar al Gobierno y exigir la
renuncia de Piñera, quien a menos de un año de terminar su gestión registra una
popularidad de apenas el 9,0 %, reporta RT.
La huelga profundiza la crisis del
Gobierno en una semana cuando las encuestas ratificaron que su popularidad es
una de las más bajas desde que asumió el poder, en marzo del 2018. “El
presidente de un dígito“, ya lo han llamado en redes sociales.
Los reclamos en su contra son
múltiples, desde el manejo de la crisis sanitaria que hoy, a pesar de la
campaña de vacunación que el Gobierno califica de exitosa, vive su momento más
crítico con toques de queda, restricciones y récord de contagios y muertes.
Igualmente, los chilenos repudian la
negativa del Mandatario de apoyar el tercer retiro de los fondos de pensiones
que aprobó el Congreso, con el fin de que la ciudadanía cuente con recursos
para enfrentar la crisis económica provocada por la pandemia.
Central de trabajadores repudia a Piñera:
“Chile vive hoy una profunda crisis
política, institucional, económica y social. Crisis expresada también desde los
partidos que apoyan al Gobierno, por un nefasto e indolente presidente”, señaló
el manifiesto publicado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y que fue
firmado por cientos de agrupaciones.
El texto sostiene que Piñera
“gobierna para unos pocos privilegiados que se hacen cada vez más ricos y que
se niegan a pagar impuestos a sus riquezas y a una verdadera reforma tributaria
progresiva”, mientras que la gran mayoría de los chilenos permanecen
“endeudados y sin soluciones integrales en el ámbito económico y social”.
De igual manera, lamenta que las y
los trabajadores paguen la crisis de la pandemia al tener que recurrir a
ahorros que estaban destinados a su jubilación, por lo que consideran urgente
una renta básica de emergencia.
En ese sentido, destacan: “No somos
sujetos de caridad, somos sujetos de derechos… este gobierno ilegítimo está
desconectado de las necesidades y de los problemas de la ciudadanía”.
En su manifiesto, la CUT también
solicitó la aplicación de políticas con enfoque de género, respuestas efectivas
al aumento de la violencia intrafamiliar, protección económica a cuidadoras y
reposición de las atenciones de salud reproductiva y sexual.
“Exigimos el término de la recarga
laboral y maltrato a las y los trabajadores de la educación y recursos para la
salud pública con que enfrentar la pandemia y atender las necesidades de las y
los funcionarios, la primera línea en la atención de la pandemia”, agregan.
Piñera contra elección constituyente del 15-16 mayo:
La Central sindical denunció que el
Gobierno de Piñera estaría intentando activar leyes para restarle soberanía a
la Convención Constituyente, que será elegida en las elecciones del 15 y 16 de
mayo.
“Solo el poder constituyente tiene la
legitimidad para pronunciarse sobre las materias y leyes que regirán nuestro
destino”, advierten en el texto. Además, recalcan que las y los trabajadores no
aceptarán que durante estos meses el Congreso legisle sobre salud, pensiones o
educación.
Del mismo modo, alertan sobre la
“permanente y sistemática violación de los derechos humanos expresada en la
militarización de la Araucanía, la persecución y criminalización a las
protestas debe terminar”, por lo que también exigen la libertad de las y los
presos políticos del estallido social de 2019, así como el fin de la represión
y el toque de queda.
“Exigimos una vida digna. Producimos
la riqueza de este país y queremos que nos devuelvan lo que es nuestro; la
soberanía sobre nuestros bienes y sobre nuestras vidas. Exigimos la renuncia de
Piñera”, reza el escrito.
La debacle:
Esta semana, Piñera fue denunciado en
la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya por crímenes de lesa humanidad
cometidos durante la represión que hubo en octubre de 2019, cuando miles de
chilenos salieron a protestar a las calles contra la inequidad que padece el país.
Organismos nacionales e
internacionales ya certificaron que las fuerzas de Seguridad cometieron
tortura, muertes ilícitas, malos tratos, violencia sexual y detenciones
arbitrarias.
La acusación está firmada por la
Comisión Chilena de Derechos Humanos (CHDH), la Asociación Americana de
Juristas (AAJ) y el Centro di Ricerca ed Elaborazione per la Democrazia (CRED),
con el apoyo de la Fundación Internacional Baltasar Garzón (Fibgar).
Vía VTV